Actividades para trabajar el valor de la amistad en secundaria
Actividades para trabajar el valor de la amistad en secundaria
Contenidos
problemas de amistad en la escuela secundaria
Formar y mantener buenas amistades es muy bueno para la salud. Nuestras amistades aumentan nuestra felicidad general, nuestra salud mental y nuestro sentido de pertenencia; ayudan a nuestra autoestima y autoconfianza y también pueden reducir nuestro estrés.
En la adolescencia, las amistades también son cruciales para desarrollar las habilidades sociales y de resolución de problemas de los alumnos. Los profesores desempeñan un papel importante a la hora de guiar a los alumnos hacia las amistades positivas y las conexiones sociales. A continuación te explicamos cómo puedes ayudar a tus alumnos a formar amistades de calidad en la escuela.
Los profesores deben identificar los intereses de sus alumnos. A continuación, pueden sugerirles actividades para que exploren, o clubes y grupos a los que se unan, para ayudarles a desarrollar nuevas habilidades y a conocer a personas con ideas afines.
Por ejemplo, un alumno activo que muestre entusiasmo por la educación física y de la salud podría ser orientado hacia un equipo deportivo de la escuela, y un alumno que sea un orador seguro podría ser animado a unirse al equipo de debate de la escuela.
Por ejemplo, crear tareas en las que se exija a los alumnos que escuchen a los demás, y que compartan y cooperen con ellos, para realizar el trabajo. Al fomentar estos rasgos, los profesores pueden crear y mantener entornos de clase seguros e inclusivos.
actividades de grupo sobre la amistad
Sin embargo, hoy en día se echa en falta una admiración similar, y la marginación de la importancia de las buenas relaciones dentro de la educación superior complementa esta tendencia. Con los intentos actuales de hacer que las universidades sean más empresariales, las evaluaciones reductoras, los análisis de costes y beneficios y los datos han tomado el protagonismo. Las estadísticas de los estudiantes se expresan en el lenguaje de las tasas de graduación y las tasas de empleo tras la graduación, que se convierten en argumentos de venta para atraer a futuros estudiantes. Este entorno también determina las relaciones entre el personal; en un mercado académico competitivo, el profesorado necesita datos para justificar su existencia, y las críticas al trabajo de los demás, en persona o por escrito, suelen parecer más combativas que constructivas. El objetivo parece ser ganar la guerra mental y así obtener una reputación superior. La cantidad ha eclipsado la calidad, y la educación superior no da en el clavo al no comprometer y alentar a todo el estudiante y al educador en su esfuerzo por convertirse en su mejor yo. Ha llegado el momento de replantear las funciones de los profesores y sus relaciones con los estudiantes y los colegas. En lo que sigue, sugiero que se adopte un marco educativo basado en una filosofía de la amistad para alimentar y mantener una comunidad intelectual más solidaria y que se apoye mutuamente.
amistades saludables para los alumnos de primaria
Formar y mantener buenas amistades es estupendo para la salud. Nuestras amistades aumentan nuestra felicidad general, nuestra salud mental y nuestro sentido de pertenencia; ayudan a nuestra autoconfianza y autoestima y también pueden reducir nuestro estrés.
Los profesores deben identificar los intereses de sus alumnos. A continuación, pueden sugerir a sus alumnos actividades para explorar, o clubes y grupos a los que unirse, para ayudarles a desarrollar nuevas habilidades y conocer a personas con ideas afines.
Por ejemplo, un alumno activo que muestre entusiasmo por la educación física y de la salud podría ser orientado hacia un equipo deportivo de la escuela, y un alumno que sea un orador seguro podría ser animado a unirse al equipo de debate de la escuela.
Las amistades de los adolescentes pueden ser turbulentas y una fuente de ansiedad para los estudiantes, especialmente para aquellos que aún no han desarrollado habilidades de resolución de conflictos. Un desacuerdo entre estudiantes puede convertir rápidamente en mala una buena amistad si ninguno de ellos sabe cómo mantener una conversación difícil.
plan de lecciones sobre amistades sanas
Sin embargo, hoy en día se echa en falta una admiración similar, y la marginación de la importancia de las buenas relaciones dentro de la educación superior complementa esta tendencia. Con los actuales intentos de hacer que las universidades sean más empresariales, las evaluaciones reductoras, los análisis de costes y beneficios y los datos han tomado el protagonismo. Las estadísticas de los estudiantes se expresan en el lenguaje de las tasas de graduación y las tasas de empleo tras la graduación, que se convierten en argumentos de venta para atraer a futuros estudiantes. Este entorno también determina las relaciones entre el personal; en un mercado académico competitivo, el profesorado necesita datos para justificar su existencia, y las críticas al trabajo de los demás, en persona o por escrito, suelen parecer más combativas que constructivas. El objetivo parece ser ganar la guerra mental y así obtener una reputación superior. La cantidad ha eclipsado la calidad, y la educación superior no da en el clavo al no comprometer y alentar a todo el estudiante y al educador en su esfuerzo por convertirse en su mejor yo. Ha llegado el momento de replantear las funciones de los profesores y sus relaciones con los estudiantes y los colegas. En lo que sigue, sugiero que se adopte un marco educativo basado en una filosofía de la amistad para alimentar y mantener una comunidad intelectual más solidaria y que se apoye mutuamente.